En estas fechas tan señaladas, no podría faltar una visita al BANCO DE ALIMENTOS, un lugar imprescindible para la vida de tantas personas y que con nuestra pequeña ayuda esperamos contribuir con los objetivos propuestos para estas navidades.
Así que dicho y echo, nos juntamos unos cuantos y nos fuimos derechos al supermercado, a comprar productos no perecederos que más necesitan.
Jose María y Juanito no tenían muy claro que comprar, ya que si fuera por ellos se lo llevaban todo.
Anita, tan decidida como es ella, ya lo tiene todo, por lo que se dispone a pagar.
Para disfrutar aún más de esta salida al pueblo, nos sentamos en una terraza a tomarnos unos refrescos, y así poder contar nuestras anécdotas del día.
Al llegar al banco de alimentos, Diego, nuestro voluntario, nos explica el funcionamiento de éste, donde se dejan los productos, donde se recogen, como se reparten...
Nosotros, tantos los residentes, familiares y trabajadores, deseamos que pasen unas felices fiestas las familias más necesitadas.
¡¡¡ENTRE TODOS PODEMOS CONVERTIR UN GRANITO DE ARENA EN UNA GRAN MONTAÑA DE SOLIDARIDAD!!!
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