Un año más, llega a nuestra residencia la Fiesta de Carnaval, una buena ocasion para demostrar nuestras habilidades como artesanos y como artistas.
Nuestros mayores se encargan de la elaboración de los disfraces y cuidan hasta el más mínimo detalle de la decoración de esta gran fiesta.
Y éste año nos hemos transformado en...
¡¡¡RELOJES!!!
Comenzamos a prepararnos para nuestra gran actuacion...
Estamos ansiosos por demostrar a nuestro público de lo que somos capaces
Nuestros compañeros nos esperan...
Tambien nuestros familiares se disfrazan para acompañarnos
Y...¡¡¡que comience nuestra chirigota relojera!!!
Que dice asi:
Yo voy guardando las horas
Dentro de mi corazón
Y por eso yo te canto
Como si fuera un reloj,
Y como son carnavales
Nos reímos y bailamos
Y cantando disfrutamos
Como abuelos, como enanos,
Y soy el despertador.
Soy abuelooo
Si suena el despertador sigo durmiendo.
Soy abuelooo
Y yo tengo el reloj hoy muy contento.
Te doy la lata, te doy trabajo, te doy dinero.
Y so lo pido que me pareeeeess
Cuaaaaaaando yo quiero.
Relojero
Cuida bien mi maquinaria porque soy viejo.
Y al compas del segundero
Voy cantando por el pueblo,
Yo soy un abuelooooo.
Lalalaraaaaaa lalaralalalalaaara laralalaraaaa.
Lalalaraaaaaa lalaralalalalaaara laralalaraaaa.
Y al compas del sengundero
Voy cantando por el pueblo,
Yo soy un abuelooooo
¡¡¡BRAVOOO!!!
¡El publico nos vitorea!
Y como detrás de cualquier gran actuación hay una gran merienda, nos ponemos manos a la obra.
Sandwiches, refrescos y aperitivos por cortesía de nuestra residencia, y gracias a nuestra amiga Ana Ortiz, podemos degustar un delicioso bizcocho en esta tarde tan especial